La canción de la gasolina, de “Moros y Cristianos”

No sé si conocen el dicho popular que afirma que “a la sombra de los gitanos roban los paisanos”. pero es curioso comprobar que el dicho se cumple en mayor número de ocasiones de las que pudiéramos imaginar.

Ahora se nos habla, como inminente, de una nueva subida de la gasolina porque estos árabes —o moros, como aquí los hemos llamado siempre— no cesan de “apretar los tornillos” a Occidente, agregando que esta crisis —por culpa del moro— no hay quien la pare.

Bien, vamos a enterarnos por lo menos de lo que se llevan los moros y de lo que se llevan otros “cristianos” que, siéndolo, agarran una tajada mayor que los propios agarenos. Los datos los tomamos de la revista de consulta y orientación del consumidor “OCU”, y por tanto son fiables. Vamos a saber cómo se reparten las pesetas que damos por un litro de gasolina súper cada español, y qué tajada se llevan los moros y los “cristianos”. Para comenzar diremos que el 67,60 por 100 del precio que paga el usuario español por cada litro de gasolina súper es fiscalidad… Oiga, si en este país se lleva tanto el Estado y los impuestos, ¿qué pasa con otros países europeos?. Pues pasa que se llevan menos. Por ejemplo, en Italia, la fiscalidad se conforma con el 63,6 por 100; en Francia, otro país latino, con el 59,6; en Holanda, con el 53,4; en Alemania, con el 51,3; en Bélgica con el 49,3, y en Inglaterra, con el 44,7 por 100. O sea, que a quien más aprietan las clavijas es a los usuarios españoles de gasolina súper.

Como el tema puede que les interese, vamos a ver cómo se reparten esos dineros, que pagamos por litro de súper, los moros y los “cristianos”. La renta del Monopolio —prácticamente el Estado— se lleva el 34 por 100; los impuestos sobre el petróleo y derivados —también el Estado— otro 34 por 100 (aunque en este 34 hay que distinguir un 2,4 por 100 de impuestos locales y el resto, un 31,6 por 100 el Estado). Para costes de producción y distribución se reserva el 10 por 100, y para el precio de origen y gastos de transportes de los crudos sólo el 22 por 100. O sea, que los “moros” se llevan sólo un 22 por 100 del precio que pagamos, arramblando los “cristianos” entre impuestos, costes y distribución con el resto de la tarta.

¿Y cuál es el coste real de un litro de gasolina súper? Pues exactamente de 12 pesetas; las 44 restantes que pagamos hasta las 56 que vale el libro, son de fiscalidad y otras gabelas… ¿Y los moros? Los moros se han llevado hasta ahora el 22 por 100 de ese precio total, del que los “cristianos” se llevan mucha mayor tajada, aunque luego protesten de los moros. ¿Qué les parece?

Diario HOY, 1 de noviembre de 1980