viernes, 2 de junio de 2017

Tabacalera se preocupa por nuestra salud

Tabacalera ha lanzado ahora una nueva labor que llevará el nombe de “B.N.”, que al parecer parte de que este tipo de tabaco es bajo en nicotina. No podemos dar más datos del mismo porque su presentación en Cáceres va a hacerse el próximo día 27, en un céntrico hotel donde, al parecer, los representantes de  Tabacalera y los periodistas se fumarán, como quien dice, esta “pipa de la paz” baja de nicotina para apreciar sus cualidades.
De todos modos nos parece que con esta manía de los fabricantes de hacernos: cerveza sin alcohol, tabaco sin nicotina y cafés descafeinados, de lo que se trata es de seguirnos manteniendo el vicio y que nos engañemos nosotros mismos haciendo más remotos los daños de una cosa y otra (nicotina, cafeína y alcohol) y que nos sigamos “envenenando” un poco más lentamente.
Uno se acuerda de aquello de: “Oiga, ¿y cómo fuma, si el tabaco es un veneno lento?”, y la respuesta de: “Pues mire, porque yo no tengo prisa”.
La Tabacalera tampoco tiene prisas y por eso nos fabrica esas labores “descafeinadas” que no sabemos si satisfarán a algunos, y hasta nos sospechamos que, con tal de vender, sería capaz de lanzar algo así como los “Cigarrillos pectorales del doctor Andreu”, con los que, al decir de quienes los fumaban, se tosía bastante más que con cualquier tabaco auténtico.
Oiga, y digo yo, ¿será tan difícil eso de dejar de fumar? Conste que yo no me he puesto a ello, pero a juzgar por los cursos de sofronización y acupuntura que se programan para dejar el vicio, las ligas de los no fumadores, etc., etc, debe entrañar sus dificultades. Pero pienso yo que en esto de dejar el tabaco lo que pasa es que uno no se lo toma en serio y lo que deja es de comprarlo y asaetea a los amigos pidiéndoles cigarrillos. Tengo yo un amigo que desde que le prohibieron fumar se ha programado fumar sólo cuatro cigarrillos al día —que según el médico le harían poco daño—, pero en la práctica, como además de los cuatro cigarros pide tabaco a todos los amigos, está fumando más que antes.
En fin, yo voy a esperar a conocer ese “B.N.”, y tras saborear algún pitillo, ya decidiré si dejo de fumar o de comprar.
Diario HOY, 24 de octubre de 1980

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