sábado, 17 de junio de 2017

Los cazadores y la prórroga de la paloma


Ayer sábado y hoy domingo los cazadores estarán desarrollando su deporte por esos campos de Dios, en busca de las torcaces, ya que se ha prorrogado el periodo hábil para la paloma, aunque a decir verdad y por lo que nos han manifestado algunos no están del todo conformes con la escasísima prórroga en la que los “prorrogantes”, al decir de ellos, se han pasado de cicateros. En Badajoz, por ejemplo, la paloma puede tirarse todos los días de la prórroga concedida; aquí no, porque sólo se han autorizado los sábados y domingos que restan del mes de febrero.
“Pero, oiga —nos decía una—, lo deberían hacer con efectos retroactivos, porque el Consejo de Caza se reunió un miércoles, dejando pasar el sábado día 7 y domingo día 8 sin que se tirara, por tanto nos los deben, y de algún modo eso debería tener efectos retroactivos porque son dos días que nos han limado´.”
“Y para cuatro míseros días mal contados que se ha prorrogado —tercia otro— se nos da con todo detalle (al igual que en el pasado año que fue más tiempo) las tres zonas donde puede cazarse la paloma, zonas cuyos puntos son tan complicados y larga la exposición que de tratar de aprendérnosla los cazadores se nos pasaría el escasísimo tiempo hábil que nos han dado.”
“Es un pitorreo, sabe usted —nos decía otro—, porque es como si te dijeran: os concedemos un día más, pero tenéis que aprenderos el ´Libro gordo de Petete´.”
En definitiva, que es así como el dicho: “para picada de mosquito, vendado de sábana”, o aquel otro de “sobra tanta alforja para tan escaso viaje”.
Yo no sé si los cazadores tienen razón o no, pero meditando en sus razones creemos que sobra tanta legislación de zona y tanta burocracia de despacho, porque con decir “se prorroga el periodo hábil de la paloma en los lugares donde haya palomas”, sobraba tanta coordinada dentro del mapa provincial que suelen suscitar las lógicas sospechas de que el “legislador” ha tratado de incluir su coto y dejar fuera el de alguien con quien “no parte peras”, como suele decirse… Sospechas, sólo sospechas, porque en esto no se puede afirmar nada y líbrenos Dios de hacerlo, pero si el legislador no se fía de que el cazador no va a tirar más que palomas, en justa correspondencia éste puede no fiarse de que haya algo más en tan teórica delimitación de zonas.
Diario HOY, 15 de febrero de 1981

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.