viernes, 25 de agosto de 2017

Tragaperras incontroladas


Yo no sé si el Ministerio de Hacienda lo hace intencionadamente o sin intención, pero el efecto que logra es “engolosinar a la clientela y luego darle en la cresta”. Lo digo a cuenta de las dichosas máquinas tragaperras, que de un modo “informal” y sin mucha norma de por medio, se permitieron instalar en todos sitios y luego, una vez que se engolosinó al personal, se dictaron una serie de normas restrictivas de su uso y, como era lógico, comenzaron a llover las multas, porque una vez que el personal se ha acostumbrado a jugar con ellas, es muy difícil hacerle entrar por la norma.
Igual, más o menos, pasó con el bingo que de momento y en sus comienzos se autorizó en todos sitios y sin mucha inspección ni norma, y cuando se había creado el gustillo a utilizarlo, tanto a los que lo montaron como a los clientes, se les ajustó un “corsé” que trajo como consecuencia cierres y multas.
La cosa, económicamente, debe irle bien al Ministerio, pero pienso yo que lo lógico sería crear antes los reglamentos restrictivos y después autorizar la utilización ateniéndose a ellos…
Per en fin, no es de estas tragaperras de las que deseo hablar, sino de un sistema nuevo e incontrolado que, con intención o sin ella, ha montado la Telefónica en muchas de sus cabinas de utilización pública.
Se viene dando el caso, más frecuente de lo que podría pensarse, de que usted deposita sus monedas en el teléfono público de la cabina, marca el número apetecido, se establece la comunicación, el llamado tiene tiempo de decirle: “Diga…”, pero antes de que usted pronuncie una palabra, el aparato corta como si usted no hubiera depositado moneda, aunque se acaba de tragar la que puso en su ranura. Repite la operación, y vuelve a suceder lo mismo. Cambia de cabina, y si no está de suerte, la nueva cabina le vuelve a repetir la operación en la que no falta más que el aparato le saque la lengua (¡la lengua, don Toribio!)… lo que huele a befa y mofa, por mucha culpa que le echemos a la electrónica… Y dicen los usuarios, y repito yo con ellos ¿Dónde se reclama el dinero gastado sin dejarle a uno decir ni pío? ¿Es a Hacienda donde hay que reclamar, ya que de máquinas tragaperras vulgares se trata, y que encima no dan premio? En fin, de este mar de dudas, desearíamos nos sacara alguien con conocimiento de causa.
Diario HOY, 13 de agosto de 1982

1 comentario:

  1. Para que encontremos muchos consejos en el blog de https://Loteriadominicanas.com/loteria/new-york-tarde-130/ es bueno que juntos aprendamos muchas cosas más y que tengamos diferentes aspectos interesantes entre nosotros.

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