miércoles, 11 de octubre de 2017

A vueltas con la televisión


La Televisión Española, la mejor televisión de España, no acaba de encontrar su sitio y ello es motivo de conversación en cualquier reunión, por lo que también hoy vamos a recoger algunas de esas opiniones, porque aquí, como en todos los lados, la “tele” es motivo de entretenimiento en cualquier hogar y el medio que más horas “come el coco” a los ciudadanos.
La nueva programación es un plomo que no hay quien lo aguante” es un dicho común que yo no sé si llega a los programadores pero, por si llegara, creo que tiene unos orígenes que merece la pena analizar para enmendarlos.
Pienso yo que cada medio de difusión tiene que ceder al otro lo que no le es propio. Cuando llegó la radio muchos pensaron que acabaría con el periodismo escrito, pero no sucedió así, sino que cada medio tuvo su propio campo: la radio para la noticia urgente, si se quiere en vivo, pero sin entrar en profundidades, reservando la explicación, el comentario y la permanencia de la noticia para el periodismo. Entonces se demostró que un medio y otro pueden vivir al mismo tiempo y sólo hubo un deslinde de campos.
El mismo fenómeno ocurrió con aquellas audiciones cara al público que se hacían en las emisoras y que, al llegar la televisión, dejaron de hacerse por ser más propia de ésta. Por ejemplo, un programa como el famoso “Un, dos, tres.” no sería hoy propio de una estación de radio porque donde mejor encaja es en televisión.
Dicho esto yo pienso honradamente que Televisión Española, o sus programadores no saben exactamente qué cosas le van a la televisión y cuáles no, y hacen un periodismo o espectáculo que es propio de otros medios de comunicación.
Por ejemplo, un concierto televisado, por muy bueno que sea el sonido, resulta un “plomo”, porque parece más propio de la radio; una larga entrevista, con unos planos largos o cortos del entrevistado, por muy interesante que sea tampoco es televisión, aunque pueda encajar perfectamente en radio o prensa.
¿No se han preguntado los programadores por qué pegaron series como las de Rodríguez de la Fuente? Pues pegaron porque era espectáculo y enseñanza a la vez. La serie hubiera sido un verdadero fracaso si Félix sale en primer plano, explicando sólo con palabras lo que tan bien explicaba apoyándose en imágenes. No sé si me explico…
Diario HOY, 13 de octubre de 1983

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